¿Por qué son importantes los cursos de prevención de riesgos laborales?

Si cuando tu empresa te comunica que debes realizar un curso de prevención de riesgos laborales lo primero que te viene a la cabeza es “qué pereza, esto no sirve de nada”, sentimos decirte que estás muy equivocado. En GEPCO Formación contamos con una larga trayectoria impartiendo formaciones de PRL y tenemos ejemplos de sobra para rebatir tu afirmación. Realizar cualquier tipo de curso de prevención de riesgos laborales, siempre que este sea de calidad, nunca es una pérdida de tiempo. Más bien al contrario, en el momento menos pensado puede ayudarte a salvar una vida o a evitar daños importantes, ya sea a tus compañeros o a ti mismo.

También existen algunas empresas que erróneamente consideran una pérdida de tiempo realizar un curso de prevención de riesgos laborales. El argumento en el que apoyan esta idea es que mientras sus trabajadores están realizando las formaciones PRL no están siendo productivos. Algunos incluso consideran que estos cursos son una pérdida de tiempo. Nada más lejos de la realidad.

Las cifras son abrumadoras: según el Informe Anual de Accidentes de Trabajo en España del 2022, el 61,9% de las muertes en entornos laborales se podría haber evitado teniendo la formación necesaria. ¿Todavía piensas que los cursos de prevención de riesgos laborales o cursos de primeros auxilios no sirven para nada?

El trabajo es uno de los lugares en los que pasamos más horas al día, al menos ocho. Durante estas horas pueden ocurrir imprevistos o pueden darse circunstancias que están fuera de nuestro control absoluto y que pueden ocasionar daños materiales y humanos. Saber cómo hay que actuar en estos casos y hacerlo de forma rápida puede marcar la clara diferencia entre minimizar los daños ocasionados a la mínima expresión o bien tener que lamentarse.

Si bien existen estas circunstancias imprevistas en el entorno laboral, hay otras que las podemos anticipar antes de que ocurran. En función del lugar en el que se lleva a cabo un trabajo pueden haber más o menos riesgos.

No es lo mismo trabajar sentado en una oficina que hacerlo encima de un andamio a cinco o seis metros de altura. Otro factor que puede determinar si estamos o no expuestos a riesgos es el producto o material con el que trabajamos. Si se trabaja con sustancias químicas u otras que pueden ser nocivas para la salud, existe mayor riesgo que en otras circunstancias.

Finalmente, las herramientas que utilizamos para trabajar son otro elemento a tener en cuenta para calcular si estamos expuestos o no a riesgos. No implica el mismo riesgo trabajar con un ordenador que con carretillas elevadoras.

No dejes en manos del azar tu seguridad o la de tus trabajadores. ¡Confía en GEPCO y fórmate!