Los espacios confinados se clasifican comúnmente en tres tipos:

  1. Espacios con entrada limitada (túneles, depósitos, pozos).
  2. Espacios con atmósferas peligrosas (falta de oxígeno, gases tóxicos).
  3. Espacios con riesgo de atrapamiento o derrumbe (silos, alcantarillas, cámaras subterráneas).

Identificarlos correctamente es fundamental para aplicar las medidas preventivas adecuadas. En nuestros cursos se realiza una clasificación práctica y se simulan entradas seguras en cada tipo.